Cuando hemos optimizado el desarrollo de una empresa, cuando hemos cubierto de forma exhaustiva el mercado doméstico, quedan dos líneas de actuación posibles:

  • La diversificación, un tipo particular de evolución para una empresa que, entonces, ya no se limita a adaptar meramente su actividad a las distintas evoluciones tecnológicas, sino efectivamente a ampliar su cartera de actividades. Va a intentar desarrollar nuevos mercados o incrementar el flujo de negocios con los clientes existentes gracias a la creación de nuevos productos o servicios.
  • La internacionalización, que se impone para las PYMES líderes, las PYMES innovadoras y las PYMES que deben anticiparse a sus competidores en un país. Esto se realiza mediante la exportación, o el establecimiento de una filial o la toma de participación, incluso la compra, de una sociedad en el país objetivo. En cualquier caso, recomendamos hacer una prueba del mercado mediante intermediarios locales (mayoristas, importadores, distribuidores…).

Estos dos modelos de crecimiento son, con frecuencia, arriesgados. El capital de experiencia de Wikane es muy valioso para evitar errores costosos.